Puente de piedra
El puente de piedra de Beceite es el primero desde su cabecera que evita el río Matarraña. Tiene un solo ojo y mide unos 15 metros de altura. Su construcción permitió que la población no quedase incomunicada en caso de fuertes riadas. Fue realizado entre los siglos XV y XVI coincidiendo con el crecimiento de la población y la formación de los nuevos barrios de Vilanova, Sant Roc y del Pilar. Hoy en día, y desde la construcción de la carretera a finales del siglo XIX, es paso obligatorio para llegar a Beceite.
En este punto, el río salva un desnivel importante desde su recorrido en el Vall del Prat hasta la población de Beceite. La fuerza del agua que ello provoca fue aprovechada para mover las ruedas de los distintos molinos a lo largo de su curso: harineros, almazaras, centrales hidroeléctricas, martinetes, papeleros, etc.
El río nace en el macizo montañoso de los Puertos de Beceite, recorre unos 100 kilómetros en direcicón de sur a norte y desemboca en el río Ebro a la altura de la población de Fayón y en el pleno pantano de Ribarroja. En su primer tramo, el río presenta caudales constantes de un régimen de tipo pluvial y en muy contadas ocasiones de tipo pluvionival.
Después de la Guerra Civil, la poza situada debajo del puente, llamada «la Cadolla» fue vaciada con cubos para recuperar las armas que se habían lanzado en su interior durante la Guerra y así aprovechar el hierro.
Fuente: Paneles públicos de información de la Comarca del Matarraña.